Tengo un amigo que sufre porque el desamor duele tanto como una noche sin estrellas.
Ha perdido los asideros que lo sujetan al mundo que lo quiere pero él piensa que no merece la pena agarrarse a ellos si no es a través de los ojos que le han condenado a su agujero.
Procuro tenderle la mano. Sólo responde con muecas de dolor.
El dicho y la experiencia nos dicen que el tiempo todo lo cura pero... ¡joder, cuánto cuesta!
Un beso, amigo.
8 comentarios:
Y yo sigo buscando recursos para que sepa que de toda su historia él es lo más importante.
Y haces bien. Pero ya sabes que él deberá pasar, sí o sí, por todo el proceso...
:(
Pobre.
Estoy recortando estrellas de papel de seda para pegarlas en el techo de encima de mi cama para que iluminen el naufragio..
Ya sabes que te quiero mucho...
Saldrá y, con toda certeza, reforzado. Pero me da tanta rabia verle mal...
Un beso, guapa (te leo pero como siempre, sin tiempo para comentar).
Es un nombre muy apropiado. Son muchos los hilos que seguir para salir del laberinto y tú eres lo suficientemente inteligente para saber cuál escoger.
Sé que lo me quieres y sabes lo que te quiero.
Y sobretodo sabemos lo que no queremos ;)
El duelo pasará, y lo mejor es que seguro que se queda sólo como un brazalete...
Besicos
Pues no sé yo que decirte.... se le otorga demasiado poder al pasar del tiempo... y sólo hace que desgastar las fuerzas que nos empeñamos en poner en olvidar..... Pero desde aquí le mando toda mi energía y buenos sentimientos para que el día a día.. no se haga más duro de lo soportable.
Gracias por tu visita y un saludo.
Algunas cosas, el tiempo, las pudre.
Esperemos que no sea el caso.
Perdón por el pesimismo.
PD: Una entrada muy personal, ¿no?... muy difícil de comentar.
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