Escribo esta historia fundamentalmente para que no se me olvide. Mi hija, de cinco años, me preguntó el otro día:
- Mamá, ¿qué es la perseverancia?
Me quedé atónita. Dudé. Y antes de pensar una explicación sencilla le dije bromeando:
- Algo que ni tú ni yo tenemos.
Me respondió:
- Si no lo tenemos ni tú ni yo, entonces no es importante.
Salió de la cocina y se puso a jugar.
5 comentarios:
Jajaja, me parto, pero no sé qué me parece mejor, si la pregunta de la hija o la respuesta de la madre…
Besos!
Siempre te lo digo, estás criando un monstruo... XDDD
Besitos/azos.
Olé por la nila y los genes de la madre ;)
jajajajajaj
Besicos
Atenta, que se nos mete en política.
Se confirma que andamos escasos de perseverancia, leches.
¡Actualiza, coño!
Besitos/azos.
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